En días en los que se rememora el último anillo conquistado por los Sixers es un buen momento para escribir de un campeón en 1983 y, tal vez, el mejor jugador que vistió esta camiseta: Julius Erving.
En los años '70, en la era post Wilt Chamberlain, protagonista del hasta entonces último anillo de la franquicia, los 76ers vivieron años oscuros tocando fondo en la temporada 1972-'73 donde finalizaron con un récord de 9-73. La peor marca en la historia. La situación iba a empezar a cambiar con la disolución de la ABA en 1976, lo que provocó que muchos equipos se unieran a la NBA, entre ellos los New York Nets que por su proximidad debieron pagar un caro impuesto a los Knicks y para hacerle frente a la multa vendieron a su estrella, Julius Erving a los Sixers.
"Dr. J" no tardó nada en convertirse en referente de los Philadelphia 76ers y en su primer año llevó al equipo a la final de campeonato donde cayeron 4-2, después de ganar los primeros dos encuentros, ante los Trail Blazers de Walton. Erving devolvió a los Sixers a los primeros planos pero siempre cayendo antes del anillo: los 76ers perdieron la final de la NBA en la 1979-'80 ante los Lakers (4-2), las finales de conferencia de la 1980-'81 ante los Celtics (4-3), este año Julius fue elegido MVP, y, nuevamente, las finales de la NBA 1981-'82 ante los Lakers (4-2).
Tantos años de nadar y morir en la orilla provocó el descontentó del líder de Philadelphia y para la temporada 1982-'83 se armó un equipo nuevo: Maurice Cheeks en la base, Andrew Toney en el puesto de 2, Dr. J de alero, Bobby Jones de 4 y Moses Malone como centro y frutilla del postre. La ciudad del amor fraternal disfrutó de un verdadero equipazo que lideró la NBA con un récord de 65-17 y que superó en post temporada a los Knicks (4-0) y Bucks (4-1) antes de cobrarse revancha ante los Lakers (4-1) para ganar el anillo. Erving promedió 18 puntos y 7 rebotes en playoffs.
El alero nacido en New York jugó cuatro temporadas más en buen nivel a pesar de no poder repetir la gesta de 1983. Anunció su retiro en 1987, a los 37 años, dando fin a una carrera impresionante que incluye títulos como MVP tanto en NBA como en ABA, 16 All-star game entre ambas ligas y campeonatos en las dos competencias. "Dr. J" fue elegido entre los 50 mejores jugadores de la historia, ingresó al Salón de la Fama del básquet en 1993 y su dorsal fue retirado en dos franquicias: Nets (#32) y Sixers (#6).
Julius Winfield Erving II marcó una época en una NBA donde los Lakers de Magic y Kareem dominaban el Oeste y en el Este los Celtics de Bird hacían estragos. Entre tantas leyendas, "Dr. J" se convirtió en uno de los jugadores más icónicos de la historia: desde ser uno de los primeros en representar productos y en tener zapatillas con su nombre, a ser una referencia para jugadores como Michael Jordan y Dominique Wilkins. Pero lo más importante es que pudo darnos un anillo compitiendo contra los mejores de todos los tiempos y por eso Erving será siempre nuestro héroe preferido.
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